¡A por cebollas!
Alumnado Infantil 4 años
Sobre lo escrito
La olla está que llora,
sola y sin nada que acoger,
pon una cebolla y agua,
rompe un huevo,
y a cocer.
Cosecha (Camille Pisarro) |
Enriquecer nuestro huerto forma parte de las tareas obligadas que hay que hacer. La tierra con el paso del tiempo se va empobreciendo de nutrientes que los cultivos necesitan y hay que reponer para que el desarrollo de las plantas sea lo más provechoso.
En esta ocasión son los infantiles de 4 años los que tomaron la responsabilidad de llevar a cabo la tarea. No puede ser más satisfactorio para ellos. Toman las palas y como si de un juego se tratara, van dejando sobre las plantaciones de tomates y pimientos la mejor ceniza. Ceniza obtenida de la quema de ramas de la poda de naranjos, limoneros, albaricoqueros, melocotoneros y ciruelos, fundamentalmente.
El abuelo José, conocedor de nuestro huerto, fue quien nos regaló la mejor ceniza para que nuestro alumnado conozca y aprenda de una más de las prácticas de nuestra huerta tradicional de Molina de Segura.
Para la tarea se necesitan pocas cosas: la ceniza, unas palas y unos niños y niñas entusiastas. Con ello… ¡el éxito en el huerto está asegurado! Y así fue. Disfrutaron como uno no se imagina y finalmente, todo quedó perfecto. Se abonaron las plantaciones y además, para acabar, regaron sobre los mismos cultivos de tomates y pimientos.
Excelente práctica tradicional con los pequeños y pequeñas del cole. Toda una felicitación para ellos.
Amigo huerto
Amigo mío que
desde que el tiempo fue
tiempo, vas sembrando guijarros
por donde es plomo el sol
y es tan espeso el polvo
del camino, que embarra el canto.
Si al ir manso a doblar
un recodo hacia el mar
vieses los ojos de esa muchacha.
Letras: "Amigo mío " (Joan Manuel Serrat)
Correteando por el huerto
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