martes, 19 de mayo de 2015

LA DIETA MEDITERRÁNEA

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LA DIETA MEDITERRÁNEA: ESTILO DE VIDA SALUDABLE Y SOSTENIBLE



La palabra dieta proviene de la palabra griega “diaita” y que significa estilo de vida. Hoy día, se entiende la dieta mediterránea, como un estilo de vida saludable y sostenible.

A lo largo de los siglos, la zona mediterránea ha ido conformando una perfecta asociación entre agricultura y cultura. El singular relieve de las tierras que conforman el área mediterránea y su clima, han permitido que se pusieran en cultivo tierras que, con el paso de los años y de los siglos, se consideren de extraordinaria fertilidad y que, desde unas prácticas agrícolas tradicionales, naturales y de respeto al medio ambiente, se fuesen cultivando excelentes verduras, hortalizas y frutales, produciendo una selección de alimentos y, al tiempo, una manera particular y original de cocinar. Todo ello, junto al devenir de los acontecimientos históricos de pueblos como: celtas, cartagineses, fenicios, griegos, romanos, bárbaros y árabes, han ido tejiendo toda una creación cultural a base de pequeños huertos, cultivos autóctonos, consumos locales, modos y técnicas agrícolas, mercados   tradicionales, intercambios, elaboraciones artesanales, prácticas culinarias particulares, sabores, fiestas y celebraciones regionales, reuniones, prosperidad y tradición. Así es, como desde unas prácticas tradicionales agrícolas, cuyo objetivo fundamental es la obtención de alimentos de alta calidad respetando el medioambiente, conservando la fertilidad de la tierra y mediante la utilización óptima de los recursos naturales, se entiende hoy día que la dieta mediterránea es una manera de vivir.


La dieta mediterránea es la forma de alimentarnos, de cómo cocinar los alimentos, de disfrutar de sus recetas y compartirlas, de entusiasmarse con los paisajes típicos que caracterizan al mediterráneo y de continuar engendrando historia, tradición y cultura, todo ello vinculado a nuestros alimentos locales representativos y su origen.

La dieta mediterránea se caracteriza por la abundancia de alimentos vegetales, como pan, pasta, arroz, verduras, hortalizas, legumbres, frutas y frutos secos, también, por el empleo de aceite de oliva como fuente principal de grasa; un consumo moderado de pescado, marisco, aves de corral, productos lácteos (yogur, quesos) y huevos y el consumo de pequeñas cantidades de carnes rojas.

Las investigaciones sobre la dieta mediterránea muestran que las prácticas agrícolas tradicionales son naturales y ecológicas, lo cual impulsa y originan beneficios en el ser humano y en el medio ambiente.


Beneficios sobre el ser humano: Hacer uso de la dieta mediterránea significa comer sano y los estudios realizados, sobre este tipo de dieta, han demostrado que el comer sano mejora la esperanza de vida de la especie humana en diez años. Fundamentalmente, provocaría la disminución de enfermedades cardiovasculares que están en aumento, debido a unos hábitos alimentarios que están abusando del consumo de azúcares refinados, grasas saturadas, aceite y alimentos como la carne.

Beneficios sobre el medio ambiente: Estudios realizados por algunas  universidades españolas de las comunidades autónomas de Canarias y Cataluña, concluyen que la dieta mediterránea es la mejor alternativa para el planeta Tierra. Sus conclusiones se sustentan en que los modos, prácticas y sistemas de agricultura tradicional vinculada a la dieta
mediterránea del pasado, ejercerían una acción beneficiosa para nuestro planeta. Los estudios concluyen haciéndonos saber que si el consumo alimenticio de España volviera por completo a los patrones de la dieta mediterránea sería algo muy beneficioso para el medio ambiente. De los estudios realizados, se destaca:

                                                         
1.      Las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas a la producción de alimentos bajarían un 72 %.
2.      La ocupación de tierras agrícolas se reduciría un 58 %.
3.      El consumo de energía disminuiría un 52 %
4.      El consumo de agua un 33 %.


Otros estudios, los realizados por David Tilman, ecólogo de la Universidad de Minnesota (EE UU), nos dicen que, actualmente, el medio ambiente está siendo dañado por la alta producción alimentaria y que un consumo de la dieta mediterránea podría:

1.   Reducir las emisiones de gas de efecto invernadero.
2.   Preservar el hábitat de las especies en peligro de extinción.
3.   Evitar la destrucción de bosques tropicales y sabanas.

En definitiva, la dieta mediterránea es un estilo de vida saludable para el ser humano y sostenible para el planeta Tierra, pues mejoran la calidad de vida de las personas y no ponen el peligro ni dañan el medioambiente. En otras palabras, con el empleo de una dieta mediterránea, se tiende a que las futuras generaciones de cualquier parte de nuestro planeta puedan progresar, crecer, evolucionar y perfeccionarse. Todo ello conforma, lo que se viene en llamar, el desarrollo sostenible y que se fundamenta en encontrar el equilibrio entre el progreso social y económico de los pueblos, es decir, mejorar la calidad de vida de las personas y no destruir el medio ambiente.



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