lunes, 9 de marzo de 2020

PLANTACIÓN LECHUGA ICEBERG


 Más fresca que una lechuga”





Siega de centeno (Tacuinum Ssnitatis -Manuscrito sobre salud-, siglo XIV)




Alumnado Aula Abierta



Sobre lo escrito





Sobre el campesino

“Si no dejas que la pereza obstruya tu trabajo, si no insultas con esfuerzos equivocados la riqueza múltiple del jardinero y si no te niegas a endurecerte o ensuciarte las manos al aire libre o extender cestas enteras de estiércol al sol, tierra seca ... Entonces, puede estar tranquilo , su tierra no le fallará ”.

Walafrid Strabo, siglo IX 






Al aire libre










Con el grupo de alumnos del Aula Abierta y una ansiada y esperada mañana, visitamos nuestro esperante e ilusionado que acepta el reto de acogernos. 








El huerto, la mañana, la tierra... provoca a nuestro alumnado. Miradas de inquietud y silenciosas cambian el paisaje del huerto. Hoy, habrá sorpresa, la magia del lugar sorprenderá.








La primera sorpresa, no hay pupitres ni sillas. Un cielo abierto para la ocasión y un aire fresco son cómplices para sorprender las miradas de los niños que escapan por todos los rincones del huerto.








Después, todo discurre como una obra ensayada. Sin equívocos ni, aún disparidad de juicios.









Mostramos las plantas y las observan. Sus ojos reclaman tener entre sus manos las plantas. Y así lo hacemos. Pequeñas manos para pequeñas plantas. Juguetonas lechugas para juguetones niños.








Después, comienza el espectáculo.
Les mostramos los escardillos y poco a poco y de manera ordenada van haciendo los hoyos y dejando al abrigo de su interior las pequeñas lechugas. 








Cuando se acaba la plantación...¡se riega la tierra!








En el mismo sitio que nos saludó la tierra, nos despedimos del frío, de las lechugas, del huerto, de la complicidad y hasta...¡de un maravilloso momento! Porque todo fue un momento.

¡Hasta otro día amiguitos! -Grita silencioso el bancalico.




jueves, 5 de marzo de 2020

REPLANTACIÓN ALMENDRO


“En febrero ya tiene flor el almendro”


Alumnado 5ºB


 
Trabajos en el campo (Miniatura medieval, siglo XIII)



Sobre lo escrito




Fragmento poema

El galán perifollo, y la achicoria
Grata á los paladares embotados;
El tierno y diminuto lechuguino;
Los blancos ajos, de apretados dientes;
Los úlpicos, que huelen desde lejos;
Los aliños que diestra cocinera
Emplear suele en sazonar las habas.
Siémbrese Chirivía; y la simiente
De Asiría, fértil madre de raíces
Que en rodajas partiéndolas se comen
Juntas con altramuces remojados;
Cuya mixtura excita el apetito
A beber la cerveza de Pelusio.

Libro X “Obra agricultura” (Lucio Junio Moderato Columela)




La replantación del almendro en nuestro huerto








Cuando mis compañeros y yo estábamos a punto de salir de la clase, para realizar alguna tarea en nuestro huerto, el maestro Pepe nos dijo que íbamos a realizar algo que había reservado para nosotros. ¡Íbamos a replantar un almendro!






Antes de ir al lugar del huerto de árboles frutales para hacer la replantación, fuimos al almacén y cogimos: el almendro, una caña, una azada, un ovillo de hilo, los escardillos,  algunas palas y la cámara de tomar fotos. Con todo eso ya estábamos listos porque era lo que necesitábamos.





Una vez allí, el maestro Pepe nos habló un poco del almendro. Nos contó que el almendro que teníamos en el huerto había que arrancarlo porque se había secado y que el motivo era que había sido regado demasiado. A mí, eso me sorprendió mucho porque yo pensaba que las plantas si se secaban, era por la falta de agua. Nunca me lo hubiera imaginado que fuese por regar demasiado.





El maestro Pepe continuó, nos dijo que el almendro es un árbol de hoja caduca y de secano, y que se estaba regando con la misma cantidad de agua que cualquier otro árbol, pero de regadío. También, nos dijo que los árboles de hoja caduca en invierno solo necesitan lo mínimo de agua para sobrevivir. Además, el almendro es un árbol de secano, por esa razón cuando lo pongamos en el hoyo, haremos que le llegue menos agua que al resto de los árboles del huerto.





Después, Chaima cogió la cámara para tomar fotos y una vez listos, empezamos dicha tarea.





Primeramente, algunos compañeros cogieron las palas para ir sacando tierra alrededor del almendro seco, pero les costaba un poco, entonces el maestro decidió ayudarles con una azada. Mientras, nosotros nos íbamos turnando para cavar y sacar la tierra. Después, tomo la cámara Walid.





Una vez hecho el agujero, me dijo el maestro que intentara sacar el almendro seco. Al principio no podía, pero luego logré arrancarlo. Fue bastante divertido. Después, entre todos reemplazamos el almendro viejo por el nuevo y el maestro Pepe lo sujetó con un hilo a una caña y mi compañera Sara le ayudó a realizar los nudos. Ya solo faltaba regar, así que nos dijo a Salma, Sara y a mí  que fuéramos al almacén a recoger las regaderas. Cogimos una regadera cada una y regamos el nuevo almendro.





Espero poder repetir la tarea algún día, porque fue muy divertido y aprendí muchas cosas nuevas.


Yessi 5ºB






domingo, 1 de marzo de 2020

PLANTACIÓN PIMIENTOS


“Ajo, sal, y pimiento, y lo demás es cuento”




Alumnado infantil 5 años




Recogiendo ramitas (Simón Bening)



Sobre lo escrito





El Gran Khan

Hacia Poniente, lejos del palacio y en una colina, ha hecho levantar una explanada a más de cien pasos de altura y de un perímetro de una milla. Esta colina está cubierta de árboles que no pierden jamás su verdor y están perennemente lozanos. Cuando se mienta ante el Gran Khan un árbol curioso o bello, que se haya visto por alguna parte, lo hace traer por medio de los elefantes, con todas sus raíces y mucha tierra, para plantarle en esta colina. (Y por grande que fuera el árbol lo traería de esta manera.) De modo que posee los mejores árboles del mundo. Las paredes que suben a la colina son de mármoles verdes y malaquita, y así, entre el verde de los árboles y las piedras del mismo tono, todo aparece verde de color esmeralda, y por eso le llaman el Monte Verde. Remata a este monte un soberbio palacio, verde también, y monte, palacio y árboles son tan bellos, que hacen las delicias de la vista. Y el gran señor los hizo construir para regalarse en ellos y complacerse.

Capítulo LXXXIV   Los viajes de Marco Polo





Bancalico que nunca pierdes tu verdor







Aquí están los infantiles de 5 años, llenos de vitalidad, ganas y entusiasmo. Hoy les tenemos reservada una sorpresa.






Comenzamos la sesión presentando las plantas del pimiento italiano. Les entregamos una planta a cada niño y niña, miran, la tocan y se sienten afortunados al tener una planta pequeña en las manos. Los niños y niñas se colman de alegría y comienza el espectáculo de la observación. Miran con detenimiento toda la planta, se detienen en el pequeño tronco, ramas, hojas… ¡Están bien contentos y satisfechos!





Para finalizar la observación les hacemos que extraigan el cepellón del recipiente para que conozcan cómo es, que observen la tierra como está apretada y sujeta por las raíces. ¡Toco un espectáculo visual y natural!, y los niños y niñas entregados.






Después de la observación y conocimiento, nos trasladamos a la zona de plantación. Allí, con la tierra bajo sus manos, explicamos la tarea a realizar, los niños y niñas van plantando sus plantitas.






Para acabar, el riego que tanto les gusta.