PLANTACIÓN DE LOMBARDAS

“En otoño, la lombarda antes que nada”

Alumnado 1ºA

Cosechando uvas (Simón Bening)

Sobre lo escrito

Canción para la manzana

Aquí ven, a este templo de Creta,

sacrosanto donde hay un gracioso bosquecillo sagrado

de manzanos, y altares perfumados

con olor de incienso.

Aquí el agua fresca susurra entre las ramas

de manzanos, y todo el sitio está sombreado

por rosales, y de las hojas que tiemblan

desciende el sopor.

Fragmento lírico  (Safo de Mitilene)

Sobre un húmedo y otoñal suelo

Siempre acaba la tierra iluminándose con el color de las plantas y siempre acaba por deslumbrar. Hoy, sobre un suelo bastante húmedo y la tierra un poco apretada, el alumnado de primer curso de primara visitaron el huerto con  agitado entusiasmo y, al final, disfrutaron de una maravillosa plantación de lombardas.

El ambiente húmedo de la mañana despertó las ganas en los niños y niñas que disfrutaban cada momento. Sobre uno de los bancalicos el grupo de niños y niñas se sentaron y los recibimos ofreciendo una sincera bienvenida y, al tiempo, mostramos las plantas de lombarda.

Se repartieron las plantas de lombarda y cada niño y niña las fue observando con auténtica admiración. Nos detuvimos en el cepellón con las raíces y la tierra que  las cubre, el tallo y las hojas. Les encantó el color morado de sus hojas. ¡Son muy bonitas!, comenta una niña.

Después, explicamos cómo realizar la plantación e hicimos una simulación para que aprendieran la destreza. Es bien fácil, le decimos. Se trata de poner cada uno y una la plantita que tiene sobre un pequeño hoyo hecho en la tierra, cubrirlo con tierra y acabar, poniéndole agua. Sin agua no sobrevivirán.

Se comenzó señalando el lugar exacto donde había que plantar cada lombarda. Para ello nos aprovechamos de unos palitos que fueron clavando. Después, cada niño y niña hizo su hoyo en el suelo con la ayuda del escardillo y cubrió el cepellón con tierra abundante y, finalmente, regaron las plantas.

La tarea estuvo bastante entretenida y los niños y niñas se mostraron bastante motivados y pusieron todas las ganas.

Nos despedimos del huerto, pero les invitamos que nuevamente lo visiten y cuiden su plantación de lombardas, que estamos seguros que crecerán de maravilla.